viernes, 17 de abril de 2009

Everything changes

De un día para otro, el mundo que conocemos cambia por completo. Puede que sea con un terremoto de 6,8 en la escala Ritcher o con unas palabras inesperadas. El caso es que cada día puede ser el final de lo que siempre conocimos.

Cuando miro hacia atrás, no puedo evitar los "y si..." y los "quizás...", pero de nada sirve y poco ayudan. Es el fin de una etapa y el comienzo de una nueva, y las lágrimas ocultan el futuro que me espera. Durante estos días he permanecido en silencio, dejando que el eco de las voces se escuchaban en mi cabeza fueran desvaneciéndose poco a poco... Ya estoy solo otra vez. Solo, pero entero. Solo, pero vivo. Siempre pensé que no sería capaz de volver a la soledad sin acabar en locura... Parece que me equivocaba.

Ahora, el mundo vuelve a ser tan grande como lo era antes, y las posibilidades se multiplican. Es pronto para tomar decisiones, demasiado temprano para hacer planes, pero poco a poco se dibujan las líneas de mi futuro. Hay luces que me llaman y teléfonos que suenan para mí. Quiero curarme antes de volar, lamer mis heridas y aprender de mis errores, sacar conclusiones y tirar adelante.

Hoy todavía es oscuro, pero Mañana será brillante

1 comentario:

Gritando en Silencio dijo...

Las horas más oscuras son aquellas justo antes de amanecer. Todo saldrá bien.

Nos vemos prontito.

Hacía muucho que no me pasaba por aquí, a ver si empiezo a hacerlo de nuevo periódicamente.

Mil besitos